miércoles, 28 de marzo de 2012

La sopa de ajo de Adriá

Mañana hay huelga general y la Mybrococina no trabaja, camaradas.

Hace un tiempo puse aquí la receta de las sopas de ajo que hago habitualmente, pero desde que Josín me regaló este libro de los menús que se preparaban el staff del Bulli, me he enamorado de esta nueva forma de hacerla, aunque puntuando que no la sustituye, porque son muy distintas. Yo la he hecho ya un par de veces y he decidido añadirle más caldo, por el tema de la textura.

Mi hermana también la puso en su blog hace unos días, como veis compartimos gustos soperos.

Esta sopa, dependiendo de la cantidad de líquido que pierda durante su cocción puede quedar más bien como una crema, deliciosa igualmente. Pero su sabor no es lo único bueno: es tremendamente económica.



Ingredientes: (para 2 personas)
  • 2 rebanadas de pan rústico o de hogaza
  • 2 dientes de ajo
  • 1 cucharadita de pimentón dulce
  • Aceite de oliva virgen extra
  • 1 litro de caldo (yo puse de verduras)

Para el huevo escalfado:
  • 2 huevos
  • Vinagre de manzana
  • Sal

En una sartén con un dedo de profundidad de aceite, freímos las dos rebanadas de pan y las reservamos. Ojo que no se nos quemen que pueden dar un sabor amargo horrible, vamos, a chamusque.

En ese aceite freímos dos dientes de ajo pelados y aplastados con el cuchillo, simplemente rotos. Si hubiese demasiado aceite sacaremos un poco, dejando lo que sería un buen chorro.
Sofreímos ligeramente los ajos y añadimos el pimentón, removemos con brío y rápidamente vertemos el caldo (recordad que el pimentón se quema fácilmente y sabe muy amargo), añadimos el pan frito y dejamos cocer unos 20 minutos a fuego medio.

Comprobamos el punto de sal y lo pasamos todo por la batidora un par de minutos, hasta conseguir la textura cremasopa.

En un cazo ponemos agua a hervir con un buen chorro de vinagre de manzana y una pizca de sal. En un bol cascamos un huevo y cuando esté a punto de hervir bajamos un pelín el fuego para que no esté a tope y echamos el huevo con cuidado. (La jugada de cascarlo en un bol es para evitar echar la yema rota la agua, que queda feo). Dejamos cocer 3 ó 4 minutos, dependiendo del tamaño del huevo y lo sacamos con la espumadera, colocándolo en el centro del plato donde vamos a servir la sopa. Alrededor del huevo verteremos la sopa y serviremos.

La cosa es que el huevo escalfado, o poché, se cocina quedando la yema líquida y es una delicia.



Una delicia lowcost.

4 comentarios:

  1. Las repartes a domicilio? Si? Guay! Dos raciones al Quirinal. :P

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  2. Tus fotos son mejores que la mía, la crema-sopa habría que verlo ;)

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  3. Pues la sopa promete pero yo prefiero la yema durita(raruna que es una) Muchísmas gracias por esta receta low cost :D Un beso!

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